Esta extraordinaria fragancia es una atrevida evolución de la icónica fragancia BAD BOY, expresa el fuerte vínculo de la fraternidad jugando de manera fascinante con las contradicciones que definen a los hombres modernos. Una fragancia de la familia ámbar con notas de entrada de pachulí y haba tonka, en el corazón vetíver de las arenas y cacao y de salida jengibre y bergamota.